Fisioterapia pediátrica
Fisioterapia respiratoria
La fisioterapia respiratoria pediátrica se centra en realizar movimientos, masajes y presiones en bebés y niños para desobstruir las vías respiratorias y facilitar la eliminación de la mucosidad acumulada. Es especialmente útil como tratamiento complementario para la bronquiolitis aguda. Las técnicas utilizadas son seguras, sin efectos secundarios y altamente efectivas, lo que ha llevado a un aumento en la recomendación de la fisioterapia respiratoria pediátrica por parte de pediatras.
¿En qué patologías se utiliza esta especialidad?
- Bronquiolitis: Recomendable sesiones diarias hasta desaparición de los síntomas.
- Neumonía: El objetivo en este caso es permeabilizar la vía aérea junto al tratamiento con antibiótico.
- Fibrosis quística: Entrenamiento de la higiene bronquial.
- Asma bronquial: No se trata en la fase aguda pero ayudamos en la prevención.
Tratamiento
La duración de las sesiones es de 30 a 45 minutos. Los padres siempre estarán presentes para acompañar y tranquilizar a los niños. Además, aprenderán herramientas fundamentales como, por ejemplo, unos correctos lavados nasales.
No dudes en consultarnos tu caso por teléfono antes de acudir al centro para poder recomendarte si podemos tratarlo, cómo y cuándo acudir.
Alteraciones digestivas
Son molestias que suelen aparecer a los 15 días de vida y que cursan con irratibilidad, llanto e incomodidad, así como tripita dura e hinchada. La mayoría están causados por la propia inmadurez del sistema digestivo y comienzan a mejorar a los 3 o 4 meses, y hasta entonces la fisioterapia pediátrica puede ser de gran ayuda. Utilizaremos técnicas de terapia manual, masaje y recomendaciones para casa.
¿En qué patologías se utiliza esta especialidad?
- Cólico del lactante: Aunque se desconoce la causa exacta del cólico del lactante, se cree que factores como la inmadurez del sistema digestivo o la sobreestimulación pueden contribuir a los episodios de llanto.
- Reflujo gastroesofágico: El reflujo gastroesofágico en bebés es común y generalmente no es motivo de preocupación, pero en casos graves puede causar irritación en el esófago y requerir atención médica.
- Estreñimiento y disquecia: El estreñimiento en bebés puede estar relacionado con la dieta, la falta de líquidos o la introducción de nuevos alimentos sólidos, y es importante vigilar las señales de incomodidad y buscar soluciones adecuadas. La disquecia, que implica el esfuerzo al evacuar las heces, puede causar molestias en los bebés.
